miércoles, 13 de febrero de 2008

Todo se amontona sin ningun patrón aparente






El límite de tiempo que me había impuesto para el primer borrador de Días hábiles se acerca -y no pienso permitirme una prórroga- y yo empecinada en cuestiones inútiles como impedir que las cosas se amontonen según se les de la gana. Poner orden o favorecer que los objetos se agrupen según su naturaleza: libros con libros, ropa de mujer con ropa de mujer, de niño con la de niño, medias con medias, discos con discos. Aquí arriba testimonios gráficos de una preocupación inútil.

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