domingo, 17 de agosto de 2008

Durante días estuve escribiendo en papeles diminutos
cosas terribles sobre vos
parecía una gitana esparciendo insultos
en boletos de colectivo, entradas de cine.
Era como aprender otra lengua
empezando por lo más vulgar
y atribuírtelo todo a vos.
Esas palabras me redimían
y después de cenar
te abrazaba debajo de las sábanas
como quien se aferra a un barco que se hunde.

5 comentarios:

Germán dijo...

Hola!
Llegué desde el blog de Paula Aramburu.leí tus poemas y me gustó mucho sobre todo la carga cotidiana contenida.Muy lindo todo, pasaré seguido.Saludos.

Carolina Esses dijo...

Gracias Cosmosurero, hoy particularmente son bien recibidas las palabras cordiales.
Besos

Mori Ponsowy dijo...

Caro, qué lindo el nuevo look del blog! Me gusta más así. Pero más me gusta este poema-enojo lleno de insultos en papelitos. Qué bien. Besos.

Carolina Esses dijo...

gracias mori,,,, sos un amor.Buena definición la que hacés del odio devenido poema. Besossssss

La fragua dijo...

guauu carito que buen poema, redondo, me encanta este mundo cotidiano que se va armando en tus poemas recientes, donde entra de golpe un pensamiento algo siniestro o algo sórdido o la ambivalencia en formas disímiles
sólo le tocaría (al poem) el "atribuirtelo" por "atribuirlo", pero es perfecto